SINOPSIS:
Después de haber leído
el libro de Ken Robinson, “El Elemento”, numerosas reflexiones y cuestiones
abundan en mi cabeza, puesto que es un libro complejo que recoge distintas
opiniones y anécdotas de situaciones reales de personas que han vivido momentos
difíciles en su experiencia en la escuela con respecto a la educación que han
recibido.
Independientemente del
campo en el que nos encontremos, ya sea arte, música, teatro, baile,
literatura, etc., todo esfuerzo e ímpetu por lo que gusta a cada uno de
nosotros y por lo que nos apasiona, podremos desarrollar y mejorar nuestras
habilidades creativas, cambiando nuestra manera de percibir y amar las cosas, consiguiendo
así encontrar nuestro propio Elemento interior.
Este es uno de los
principales aspectos que Robinson resalta en el libro, ya que hace
hincapié en la búsqueda y reflexión de nuestro elemento, para que no caigamos
en el error de renunciar a nuestras habilidades por el simple hecho de
encontrar estabilidad laboral o no luchar por nuestros sueños.
Con ayuda de esto, toma
como raíz la situación destructiva de la educación actual, y con ello, reclama
cambiar el modelo educativo, no cambiarlo, sino transformarlo en uno nuevo que
resalte los valores y las habilidades de los alumnos.
En los colegios y en las
escuelas obligan a los alumnos a adquirir conocimientos, les obligan a
estudiar, pero no potencian su capacidad creativa ni les motiva a desarrollar
su inteligencia manual. Deberían formarlos con el trabajo y la actividad
práctica, dejando que fomenten libremente su la creatividad e imaginación.
Cuando nos apasiona lo
que hacemos y tenemos la preparación adecuada para hacerlo, estamos en nuestro
estatus, en esa situación en la que disfrutamos con lo que hacemos. Si de pequeño en la escuela ya nos niegan ese aspecto y no nos ayudan
a encontrar nuestro Elemento, no veremos la estabilidad emocional para un mejor
desarrollo en el futuro.
Ken Robinson nos enseña,
mediante experiencia de otros, como por ejemplo Matt Groening o Paul McCartney
entre otros, como se puede alcanzar esa plenitud emocional, ese estado de
bienestar. Estas personas han sacado lo mejor de ellas, en diferentes
profesiones y ámbitos, consiguiendo así muchas cosas en su vida, pero no son
los únicos capaces de lograrlo.
Tal como dice Ken
Robinson en el libro:
“El Elemento es el punto
de encuentro entre las aptitudes naturales y las inclinaciones personales.
[...] Cuando las personas están en su Elemento establecen contacto con algo
fundamental para su sentido de la identidad, sus objetivos y su bienestar.
Nosotros
debemos estar capacitados para encontrar soluciones creativas a los problemas.
El problema principal es que no fuimos preparados para ello, y las nuevas
generaciones que vienen tampoco están siendo educadas para ser creativos ni
encontrar su Elemento. Encontrar nuestro elemento supone desarrollar
capacidades de nuestra mente y de nuestro interior que cambie nuestra persona y al cabo, nuestra vida.
En
la escuela, por mucho que estudiemos, aprendamos datos, nombres, etc.,
únicamente nos enseña eso, cosas que podemos encontrar en los libros, lo demás
lo aprenderemos en la calle con el paso de los años y con la experiencia. Al
final nuestro futuro lo vamos a elegir nosotros mismos, no una fórmula
matemática que ponga en un libro; nos guiaremos por nuestra intuición, nuestros
gustos, las cosas que nos apasionan y nos llenan; pero para estimular
lo que nos apasiona, hay que llevar a cabo un proceso en nuestro propio
elemento, y analizar dos características principales en él: CAPACIDAD Y
VOCACIÓN, las cuales dependen principalmente de la ACTITUD y la OPORTUNIDAD:
-
Lo entiendo
-
Me encanta
-
Lo quiero
-¿Dónde
está?
CRÍTICA
Haciendo
una crítica personal, en una situación difícil o que nos cuesta y nos ponen
muchos impedimentos, los resultados no siempre serán satisfactorios o no como
nosotros esperábamos, siempre encontraremos piedras en el camino, pero tenemos
que ser capaces de saltarla y seguir. Algunas personas relacionan esta
situación con la mala suerte, por situaciones difíciles que han vivido, pero el
futuro de cada persona no depende de la suerte, sino de la disposición y el
comportamiento con el que nos tomemos las oportunidades que se nos ofrecen, y
tener el talante suficiente para aprovecharlas.
Por
otra parte, en cuanto al tema de la educación, pienso que solo pretenden machacarnos para enfrentarnos a la industria capitalista y
a la economía mundial. Su tema de interés es cómo competir con el resto de
personas, como encontrar trabajo y ganar dinero. Se olvidan de lo que quieren
los niños y se preocupan de lo que quieren ellos, de lo que quieren los
políticos.
Suprimen la libertad, la
creatividad y la imaginación, quitan a los niños las ganas de aprender y
eliminan de sus mentes sus verdaderas pasiones; el colegio se convierte así en
una especie de fábrica destinada a producir en serie y les tratan como peleles
manejados por una mano con poder.
Sin
duda este libro me ha hecho reflexionar, me ha mostrado una situación que está
ocurriendo actualmente y que por desgracia va a peor. Esto ha hecho que siga
luchando por lo que me gusta, motivándome a superar mis propios obstáculos y afrontar
nuevos retos y nuevas metas sobre lo que me apasiona y me llena.
CITAS O COMENTARIOS:
“A veces, equivocarse significa simplemente equivocarse. Pero si no estás
preparado para equivocarte, nunca se te ocurrirá nada original.” Pág. 37
“La forma de percibir nuestras circunstancias, así como la de crear y
aceptar las oportunidades dependen en gran medida de lo que esperamos de
nosotros mismos”. Pág. 49
“Cosas buenas y cosas malas ocurren siempre. Lo que nos pasa no es lo que
marca la diferencia. Lo que marca la diferencia es nuestra actitud en cuanto a
lo que pasa.” Pág. 215